viernes, 9 de mayo de 2008

Estuve enamorada...

Cuando decidí empezar a escribir este blog, la idea era algo totalmente diferente a lo que es ahora. Lejos de querer ufanarme de mi "relación perfecta", lo que quería era mostrar a quien quisiera leerlo que sí es posible tener una relación larga y buena. Quería probarle al mundo que el amor sí existe, que la felicidad es posible, que las relaciones humanas no necesariamente se ven afectadas por nuestras debilidades terrenales. A pesar de todo lo que ha pasado en estos últimos días, aún puedo decir que no me equivoqué.

Ok, Adam me engañó. En un momento de estupidez tal vez, más que infiel, me fue desleal. Traicionó la buena impresión que siempre tuve de él, dejó de ser especial, mi especie en extinción. Ante mis ojos pasó de ser uno de esos chicos que ya no existen a un hombre más en el planeta, de esos que llenan los clichés en los chistes feministas. Así es la vida. Qué me hizo renunciar esta vez? La decepción. La verdad golpeándome a la cara con guante grueso. La sensación de estar con un extraño.

Si me lo hubieran pedido hace una semana, yo hubiera sido capaz de poner las manos al fuego por Adam y sin dudarlo. A pesar de que a él siempre le hice sentir que yo andaba en guardia, en realidad nunca lo estaba, confiaba tanto en él que le creía absolutamente todo lo que me decía, y me sentía segura con él. Sentía que si saltaba de un techo el estaría abajo para atraparme. Me sentía amada, y lo amaba de igual forma y con la misma intensidad con la que él demostraba amarme a mí. Aún recuerdo esa sensación de que no habría nadie más en este mundo con quien sería feliz. Y no hablo como ciega enamorada, todos eran testigos de lo "perfecto" que era Adam para mí y de cuánto me quería.

Todo eso terminó el sábado en la noche. Descubrí que Adam no es ningún lobo gris, sino un mustio canino. Que una chica extranjera le puede calentar la cabeza por una noche como a cualquier peruano. Que puede utilizar su inteligencia para crear la mejor elaborada historia. Que es capaz de ocultar la verdad durante año y medio. Que miente descaradamente y sin remordimiento alguno. Que niega todo aún cuando la verdad es demasiado obvia. Que piensa que con decir "Lo siento" y enviar flores al trabajo se arreglará el mundo. Que es débil, hipócrita, traicionero y mentiroso. Sí. Lo es.

Entonces, volviendo al punto inicial, no me equivoqué:

El amor existe, pero solo el de tus padres, no cuentes con el de nadie más, así creas tenerlo. Cualquier otro tipo de amor que no sea el paternal, es efímero y dependiente de las situaciones, no es incondicional, y es usualmente cambiante.

La felicidad es posible, pero solo si la basamos en nosotros mismos. Si creemos que seremos felices gracias a alguien más, estamos cagados desde el inicio.

Las relaciones humanas no necesariamente se ven afectadas por nuestras debilidades terrenales, si el novio está castrado.

1 muestras de empatía:

Anónimo dijo...

Así es Lil'Lo... a veces cuando nos va mal perdemos la fe en el amor, pero siempre recuerda que al final todo estará bien, y si no está bien es porque no es el final. Besos. Tu tía.